7.29.2006

FZ zoot allures

Frank Zappa en São Bernardo do Campo

Al lado de Maurilio Comino, en la Calle 23 de maio, Jardim Antares, São Bernardo, vemos a Gustavo Pena con una expresión que seguro recordará a Frank Zappa.

No está lejos de la verdad decir que Frank Zappa aterrizó en São Bernardo por esa época. De hecho, todo cabe en un tamaño único: desde la descripción pormenorizada del itinerario de San Berdino (She lives in mojave in a winnebago. His name is bobby, he looks like a potato...) hasta los parajes algo-serialistas de The perfect stranger...

Nunca más dejé de apreciar ciertas circunstancias zappianamente. Creo que mi madre tampoco. Las cajas acústicas de la calle Jurubatuba berreaban para desespero de Doña Amélia: my guitar wants to kill your mama...

Bernaux cité, sus calles enreheladas, sus esquinas sucias y malvadas, transitábamos por sus cafés, escaparates, visitábamos el Bar de las Putas en el final de la noche para una cerveza. Jam sessions impregnadas de cannabis y sueños. Ciça, Amauri, Dito, Joãozinho little. Tribu maltés. ¡Cuánta cosa cabe en el tamaño único de nuestro inconsciente!

Cierta vez, bajando la Marechal Deodoro, al lado del fallecido Cine Anchieta, nos apostamos delante de la puerta de una tienda de artículos femeninos, como si fuéramos maniquíes. Estatuas minimalistas, en realidad. Expuestos a la mirada curiosa de transeúntes asustados, con gestos minúsculos reportábamos una percepción trascendental, interpersonal, intertemporal. ¡Éramos seres alienígenos!

Andábamos con sombreros en el rocío, relojes-despertadores en el bolsillo de la gabardina cincuentona y flores en la solapa. Una generación flower-power asíncrona. Nuestra lectura del fenómeno cultural que avasallaba a la juventud era no-linear. Notábamos claramente la intertextualidad que traspasaba el sonido y la letra del rock que a final componía nuestra banda sonora y pautaba un comportamiento de laxismo formal, apuntando para un reencuentro con el sentido más sencillo de la vida.

No por casualidad convergíamos en núcleos de convivencia. Un capítulo a parte sería "La familia", en el sitio de la Doña Laura. ¡Eso queda para después!